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24 septiembre 2008

Despierta

¿Estás sentado? … no sé. Parece que te has quedado dormido en esa postura. Estas tan a gusto que no puedes moverte.. o quizás sí, pero no quieres. Si fuera por ti permanecerías en esa posición tan cómoda por siempre, apoyado en un suave respaldo, sin saber muy bien donde tienes los brazos, porque casi no los sientes.  A decir verdad en este momento no te importan… No sabes dónde estás metido, ni recuerdas por qué has acabado allí.

Es un estado próximo al sueño. Pareces flotar en el vacío y sólo percibes el ruido de la lluvia de fuera.

Desde fuera también se oye un acompasado ritmo que parecen las pulsaciones de tu corazón, en un compás constante. A cada golpe tu oído palpita como lo harían tus pulsaciones en el tímpano, y esperas inevitablemente a que llegue el próximo… y el siguiente… y el otro… sin que puedas controlarlo. Y sin poder evitar que todo se convierta en un zumbido.

Pero lo que realmente llama tu atención es otra cosa. Tu mirada está fija en la curiosa formación de perlas que hay frente a ti. Son de color rojo fuego, casi cegador, de un brillo hipnótico y de formas irregulares, todas ellas parecidas pero distintas. Como si estuviesen pegadas a la pared.

Parece que es de noche, o puede que el brillo de las perlas confunda y todo a tu alrededor quede difuminado en el olvido. Estás definitivamente encandilado por ese rojo tan intenso que se hunde en tu retina al compás de las pulsaciones, y simplemente crea esta sensación placentera en la que estás, y te hace olvidar todo lo demás  y sólo piensas en lo relajante que resulta quedarse ahí mirándolas.

Sin avisar, todas tus perlas cambian repentinamente al unísono al color verde. Un verde brillante que rompe tu sueño por la brusquedad del cambio. Parece que ya recuerdas dónde estás. Ya te acuerdas de todo. Te das cuenta como la lluvia sigue cayendo en tu parabrisas, y oyes el chirrido de la goma de las escobillas que continúa, en un lento compás repetitivo, arrastrándose de un lado a otro. Ahora que el semáforo ha cambiado, y vuelves a sentir tus manos sobre el volante, continúas tu camino gris… 

21 septiembre 2008

Experimento Social: "¿Por dónde vas?"


Muchos de vosotros habréis percibido que cuando se viaja en algún medio de transporte colectivo, como es el caso de los autobuses de largo recorrido, y nos acercamos al final del trayecto o ciudad de destino, es cuando comienzan a sonar masivamente los teléfonos móviles del pasaje. Generalmente se trata del pariente o conocido que espera en la estación para recogernos, y hace la mítica pregunta de “Por dónde vas?...
Esta es una recopilación de las diferentes respuestas oídas en un autobús a esta pregunta:

CASO 1: “NO IMPORTA, EL CASO ES QUE ESTOY EN EL AUTOBUS”
Se trata de la respuesta más frecuente y con menor contenido informativo:
- Pueees… no sé… voy llegando ya.
Esta respuesta confirma que la pregunta “¿Por dónde vas?” se trata simplemente de una frase hecha para entablar genéricamente una conversación.

CASO 2: “CALCULANDO LA HORA QUE ES… Y LA QUE DEBERÍA SER…”
En este segundo caso se trata de hacer una estimación en base a la hora estimada de la llegada impresa en el billete:
- No se…, la verdad… supongo que faltará menos… . ..de todas maneras ya son las 4, ¿no?…. pues,… me quedan 2 horas más…
Esta respuesta no confía en encontrar atasco a la entrada de Madrid.

CASO 3: “EL CUENTAKILOMETROS REVERSIVO”
En este caso, el pasajero lleva un buen rato desesperado mirando los carteles de tráfico y para ir calculando los kilómetros que le quedan. En el momento de la llamada responde:
- “…pues el último cartel ponía que faltaban 236 km. … así que quedará menos…”
Llegados a este momento, el familiar del otro lado de la línea, calcula mentalmente la velocidad del bus, divide entre el dato facilitado y despeja mentalmente la incógnita que le planteó.

CASO 4: “A LA ALTURA DE…”
Este caso, a diferencia del anterior, se reconoce fácilmente por el intento de leer rápidamente desde el autobús en marcha el nombre del pueblo del siguiente desvío:
- Pues… me falta…., no sé… es que no veo los carteles… …, no, si ya… ¡ah sí, mira!, vamos por Valdecampo de la Castilleja.
Se supone que ahora la madre va corriendo al google a buscar donde queda ese pueblo perdido y saber exactamente las coordenadas de su hija.

¿Y tú que sueles responder?
Próximamente más Experimentos Sociales.

15 septiembre 2008

...¡Acción!

Ha pasado mucho tiempo, más de dos años según la última fecha del post anterior, desde que en un arrebato de snobismo me decidiera a crear este blog para formar parte también de la comunidad blogera del mundo... ¿para luego qué?: abandonarlo a la deriva en la red...

Lo curioso es que de vez en cuando recibía comentarios de gente que me preguntaba "Por cierto, ¿tu blog ese sigue ahí donde lo dejaste...?" y sinceramente, no sabía que alguien se tomara la molestia de entrar en este sitio tan cutre (tendríais que haberlo visto antes) a curiosear si había actualizado o no...

Sea como fuere, y como parece que tengo -más que lectores- curiosos, creo que me debo a mi "público", y debo de reconocer que también me he ilusionado de nuevo con la idea. Así que he decidido que es hora ya de darle vida al Whaden Blog, al menos para aquel que le interese.

He pasado varios días cambiando el diseño, y actualizando la plantilla que estaba caducada en Blogger. Lo cierto es que me ha tenido bastante entretenido. Y ahora que más o menos me decido a escribir, lo regularmente que me sea posible o me venga en gana, me veo ante la gran duda de "...y ahora de qué escribo".

Pues sinceramente, no tengo ni puta idea. 
Solo espero que ahora no dejen de leerme... (...por favor...)